G.Ortega – EuropaSur
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han detenido a un individuo de 31 años y de iniciales J.L.F.H., al que se acusa un delito de malos tratos en el ámbito doméstico y de otro de detención ilegal. Un juzgado decretó ayer su puesta en libertad con cargos.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del miércoles al jueves en la barriada de El Saladillo. Pasadas las doce de la noche, una mujer denunció por teléfono que había presenciado una escena muy desagradable: el citado individuo, de forma que la denunciante calificó como bastante violenta, obligó a su ex mujer y a su hija a montarse en su coche. La denunciante asegura que también observó que en el portón de la casa de ella, en la calle Federico García Lorca, él le agredió.
La siguiente gestión de los policías fue localizar a la mujer presuntamente víctima de los malos tratos de quien fue su compañero. Lo hicieron, por vía telefónica, y la convencieron para que presentara una denuncia por escrito, cosa que se produjo en torno a la una de la madrugada.
A continuación, hasta cuatro coches zeta del Cuerpo Nacional de Policía se presentaron en el domicilio del supuesto agresor y procedieron a su detención y traslado a los calabozos de la comisaría en la avenida Fuerzas Armadas. Según fuentes policiales, el hombre no ofreció resistencia.
Ahí permaneció hasta que, ayer por la mañana, fue trasladado al Palacio de Justicia para prestar declaración en el juzgado de Instrucción en funciones de guardia. La decisión adoptada por el órgano judicial ha sido la de dejarle en libertad provisional, pero no sin antes advertirle de que tendrá que responder ante un tribunal por los dos delitos de los que se acusa.